Conseguir que una mujer llegue al orgasmo no es tarea fácil. Requiere de práctica y buen hacer. Pero con la técnica adecuada no debería ser difícil para nadie. Cualquiera puede lograrlo, y en tan solo 15 minutos. Al menos eso es lo que aseguran los sexólogos del Instituto Kinsey, en EEUU, los cuales descubrieron que una mujer promedio puede tener un orgasmo después de 10-20 minutos de relaciones sexuales. ¿Tú tardas más? ¿Ni siquiera lo consigues? Atento a la siguiente guía proporcionada por ‘Men’s Health’, que promete hacer que ellas toquen el cielo en el tiempo promedio indicado.
Del total de 15 minutos, debes invertir al menos los primeros tres primeros en besos. Los estudios realizados por Lafayette College descubrieron que los besos reducen los niveles de cortisol, la hormona del estrés, lo que acelera el tiempo que se necesita para excitar a ambos.
Truco de experto: mientras besas, inclina la cabeza hacia la derecha, ya que se ha descubierto que esto te hace parecer más afectuoso, lo que inunda el sistema de tu compañera de oxitocina, la hormona de la «conexión», generando confianza y animándola a acudir rápidamente. Del total de 15 minutos, debes invertir al menos los primeros tres primeros en besos, ya que, según los científicos, estos reducen los niveles de cortisol Has de empezar por la boca y seguir con su cuello.
Mientras, ve desnudándola poco a poco, así podrás anteponerte a cualquier falta de confianza que ella pueda tener con su cuerpo. Un estudio de la Universidad de Cincinnati reveló que si una chica se siente bien cuando está en cueros, se correrá antes. Aunque vayas quitándole prenda a prenda, debes mantener su ropa interior durante un minuto más o menos.
«Debes acariciarla a través de la tela en lugar de ir por el oro de pronto», asegura la terapeuta sexual Paula Hall. «Céntrate en crear anticipación en lugar de ir directamente a la estimulación directa». Debes actuar como si tuvieras todo el tiempo del mundo, pues si ella se siente presionada, se cohibirá y tardará más en alcanzar el clímax.
Cunnilingus y la postura TAC
El cunnilingus puede ser una bomba de placer o todo un tormento para la que recibe. Si lo haces bien, hay un 80% de posibilidades de que ella llegue al orgasmo, de acuerdo con los sexólogos del Instituto Masters & Johnson. Si no sabes cómo hacerlo, aquí tienes una guía básica. Una vez que hayas acabado con el sexo oral, durante unos 5 minutos, pasarás al coito. Evita los golpes profundos; en su lugar prueba la técnica de alineación coital. Para hacerla, comienza en el misionero clásico y luego retrocede para que la base de tu pene descanse sobre su clítoris. Sujeta los pies contra el pie de la cama y oscila hacia atrás y hacia adelante en lugar de empujar. Tu pene masajeará así suavemente su clítoris.
El último minuto es clave
Queda menos de un minuto para llegar a los 15. Tu chica debería estar ahora mismo arañando las sábanas, pero necesitas un truco final para obtener el resultado deseado. Una sola distracción, un solo movimiento en vano o palabra inadecuada, y desandarás todo el camino de repente. Si ves que hasta el momento vas bien, sigue haciendo lo que estás haciendo justo cómo lo estás haciendo. Es decir, no cambies el ritmo ni de postura. «Las mujeres odian que cambies de técnica. Nos distrae y lleva nuestra excitación de regreso al inicio», revela la doctora Joni Frater.
El cunnilingus puede ser una bomba de placer o todo un tormento. Si lo haces bien, hay un 80% de posibilidades de que ella alcance el clímax «Cuando empiezas a hacer algo que causa una respuesta positiva, sigue haciéndolo, exactamente a la misma velocidad y presión», añade. Guarda tu nueva técnica para la próxima vez. Si has seguido todas las indicaciones al pie de la letra, ella debería estar justo en el minuto 15 alcanzando el éxtasis.